Galería de personajes

viernes, 30 de diciembre de 2016

Reseña de "El sumergible" de Joseph Remesar




Segunda parte de las aventuras del inspector James Usera-Brackpool donde volvemos a encontrarnos con algunos de los personajes que ya habían aparecido en la primera parte y se introducen otros nuevos. Uno de ellos, en especial, es un homenaje a la obra de Verne que incluso podríamos considerarla continuación de la misma.

Se trata de una novela más meditada, por lo que una de las características que más apreciaba en la primera parte (El dirigible) queda diluida. Pierde frescura y rapidez en la acción para dar más importancia a las descripciones de funcionamiento de máquinas que nos ralentiza ese ritmo rápido en determinados momentos. También es verdad que para los amantes de la ciencia ficción hard puede ser un aliciente, porque se muestra la gran documentación que el autor ha manejado a nivel tecnológico, con descripciones muy detalladas y coherentes, en especial en cierta parte de la narración, de la que no hablaré para evitar spoilers, en la que sus soluciones demuestran la reflexión minuciosa ante los problemas prácticos. Además introduce la conocida teoría del multiverso que aparece esbozada, tal vez para retomarla en obras posteriores.

En cuanto a los personajes, se han desarrollado algunos de los que quedaron simplemente esbozados en la primera parte, dándoles mayor importancia en esta novela. Se les unen otros que se convierten en co-protagonistas junto al inspector que pierde cierta importancia. Se pasa de llevar el peso narrativo un solo personaje a que sea el conjunto de ellos. Se agradece también que no sean sólo los personajes masculinos los que detenten el monopolio de la acción como sucedía en la primera parte, en la que los personajes femeninos brillaban por su inteligencia y no por su acción práctica. Es agradable así mismo que el autor nos haga cómplices de la narración con menciones a personajes, tanto reales como ficticios, que son muy conocidos y fácilmente reconocibles tanto por su nombre como por sus actividades. Mi gusto por los personajes sobre el propio argumento tal vez haya condicionado mi opinión, ya que el autor ha dado mayor importancia a la ideología y la tecnología en detrimento de las relaciones personales. Los momentos de pura acción están muy bien relatados y consiguen acelerar el ritmo que se pierde con las descripciones detalladas que recorren la obra.

En resumen, para los que gustan de descripciones detalladas y coherentes, será una buena lectura con numerosos guiños que hacen que el lector se involucre en la narración.
Por último, sólo agradecer la amabilidad del autor al hacerme llegar una copia antes de su lanzamiento oficial. He disfrutado al embarcarme en este sumergible.

martes, 13 de diciembre de 2016

Reseña de "Siempre hemos vivido en el castillo" de Shirley Jackson





Llevaba tiempo queriendo leer “Siempre hemos vivido en el castillo” de Shirley Jackson, una de las grandes escritoras de terror. Pero, como me ha ocurrido en otras ocasiones, no ha llegado a cubrir mis expectativas. No quiero hacer spoiler, por lo que sólo diré que pronto se desvela la intriga principal. Luego únicamente esperamos durante toda la novela a ver quién es el siguiente que muere, pero hasta eso se nos niega. La autora no quiere satisfacer nuestra curiosidad en este ni en otros aspectos. Todo el principio nos está prometiendo una intriga que tarda en llegar y, cuando lo hace, no viene del lugar de donde lo esperábamos, y se queda en algo que nos recuerda bastante al “Frankenstein” de Mary Shelley. Esa escena sí que está bien planteada y parece que nos va a llevar a una apoteosis… que no llega nunca; para terminar con una historia típica de leyenda urbana. Tal vez cuando se publicó (1962) sería innovadora, pero ahora hemos visto y leído cientos de historias semejantes.

Sentía curiosidad por saber qué es lo que otras personas habían encontrado en la novela y he leído un par de reseñas después de mi lectura, y me he dado cuenta de que ni ellos se ponen de acuerdo. Unos hablan de que la protagonista es una niña, otros de que es una mujer de dieciocho años con problemas psicológicos y retraso emocional. Sí, problemas psicológicos los encontramos, pero no sólo en ella, sino en su hermana mayor.  De nuevo, la autora no quiere darnos todos los detalles y no queda claro en qué terminó el juicio por la muerte de la familia. Esta muerte queda sin resolver, aunque el pueblo hubiese juzgado y condenado ya a una persona. Si la absuelven habrían que buscar a un culpable, cosa que nunca se hizo, al menos es lo que parece decirnos la autora.

Si la protagonista es una niña podría entenderse más claramente su forma de actuar y los vetos que tiene impuestos, pero hay demasiadas insinuaciones y demasiadas cosas sin explicar que quedan en el aire. No me importan los finales abiertos, pero aquí hay muchas lagunas que la autora no nos cuenta.

La novela es una novela de personajes donde tiene más importancia lo que hacen o, en el caso de Merrycat, lo que piensa. Esta protagonista me ha llevado a compararla, salvando las distancias y añadiéndole esa nota maligna, con Auri de “El hombre del viento” de Patrick Rothfuss y, más concretamente, en su novela “La música del silencio”. Los objetos son personajes y cada uno tiene su sitio. Se les concede más vida que a muchas personas de carne y hueso que aparecen en ella; cosa que ocurre en esta novela de Jackson. Algunos de sus personajes reales nos los quiere mostrar tan claramente a través de sus acciones que casi se nos presentan como arquetipos.

Tal vez tenía demasiadas expectativas y es lo que me ha llevado a no disfrutarla plenamente. La ambientación es muy buena, pero me deja con tantas lagunas la historia que no ha conseguido gustarme.

lunes, 12 de diciembre de 2016

Reseña de "Ni colorín ni colorado" de Rafael González





Como bien indica el título, estamos ante un conjunto de cuentos muy conocidos por todos. Pero el autor en algún momento se preguntó si esos cuentos tradicionales podían contarse de otra forma. Y lo ha conseguido. Se trata de historias que todos hemos leído o escuchado, incluso hemos visto, en algún momento de nuestra vida. Pero, como un Disney malévolo, Rafael González les ha dado una vuelta de tuerca para lograr “Ni colorín ni colorado”. Como podemos suponer por su título, las historias no terminan con sus protagonistas comiendo perdices. Algunos finales pueden ser intuidos si conocemos el cuento original, pero ninguno acaba como sus modelos. Otra característica importante es que se atreve a adaptar la historia a diferentes géneros, y así llegamos a encontrar ciencia ficción, steampunk, western y, por supuesto, terror, apartándose totalmente de la visión que Disney nos ha mostrado de esos cuentos infantiles. Como he dicho, unos son más fácilmente reconocibles que otros. Algunos no llegamos a hacerlo hasta el final, pero a todos les ha buscado un enfoque original.

La mayoría de los protagonistas no son esos personajes planos de los cuentos originales. Tienen sus motivaciones o son conscientes de que las circunstancias les obligan a actuar como lo hacen. No hay buenos o malos en sentido estricto. Incluso personajes que, en sus originales, estaban en un bando, ahora podemos encontrarlos en el opuesto.

Otro aspecto que quiero destacar del libro es su cuidada edición. A pesar de ser un libro auto editado, se nota el esmero que su autor ha puesto en él, superando en calidad de edición incluso a algunos de editoriales de renombre, con lo que nos desmiente la idea preconcebida de que la autoedición es sinónimo de baja calidad. En este caso, se muestra claramente que no es así.

Con todo lo dicho anteriormente, creo que ha quedado clara mi opinión sobre esta colección de cuentos a los que ha sabido dar una vuelta para que dejemos de tener esa visión idílica que Disney nos ha mostrado. Cuando cerramos el libro nos queda esa sensación de preguntarnos: ¿por qué no?

domingo, 4 de diciembre de 2016

Reseña de "El dirigible" de Joseph Remesar




Lo primero a tener en cuenta es que se trata de la primera novela del autor. Desde esa premisa podemos empezar a analizarla. Se trata de una novela con dos partes muy diferenciadas:

1.- Escapada en las nubes: que se caracteriza por su frescura y su rapidez. Es una historia auto conclusiva, aunque echamos en falta algunas explicaciones al final que el autor deja a nuestra imaginación.

2.- Nicole y la máquina: esta segunda parte rompe el buen ritmo que tenía la primera parte y nos introduce una serie de hechos que, en principio, no sabemos si tendrán relación, con lo que nuestra sensación es de que se ha perdido esa frescura y agilidad que tanto nos había llamado la atención. Posteriormente los hechos comienzan a encajar y nos damos cuenta de que el autor no ha querido contarnos todo. Lo que nos lleva a esbozar una leve sonrisa cuando descubrimos quién es el personaje simplemente apuntado con su nombre de pila. Hechos a los que no les vemos coherencia ni razón de su aparición serán recogidos al final de la novela. Aunque el autor corre aquí el riesgo de que nos parezca deshilvanada e incluso un poco pesada. Pero, conforme nos acercamos a su conclusión, notamos que vuelve a coger ritmo para desembocar en una escena rápida y sin pausa.

Desde esa premisa de la que he hablado al comienzo, podemos pasar por alto el pequeño desorden y algunos fallos de autor novel como la repetición de palabras muy seguidas que un buen corrector o editor hubiera solucionado sin problema. Lo que ya no es tan fácil de pasar por alto es la introducción de palabras y expresiones inglesas que, al suceder la acción en Londres, no tienen sentido lógico. También empaña un poco su buen hacer la introducción de onomatopeyas en las intervenciones del narrador que parece rebajar un poco el nivel de la propia narración.

Pasando por alto estas cosas que podemos achacar a que, como he dicho, es su primera novela, es un libro fácil de leer con una trama que no decae demasiado manteniendo una tensión final de forma muy aceptable y que se agradece después de la ruptura de la misma al inicio de la segunda parte.
Los personajes están bastante perfilados y los vemos crecer en importancia a lo largo de la historia. Tal vez alguno de ellos se sale de lo que esperaríamos de una época victoriana, pero otros son personajes típicos, como el inspector de policía protagonista o su antagonista de la segunda parte. Son personajes con los que pronto empatizamos y nos preocupa lo que pueda pasarles. El compañero del inspector, por alguna razón que no llego a comprender, me ha recordado al personaje que interpretaba Andy García en la película Black Rain (la verdad es que no sé por qué, a pesar de su raza, lo estaba viendo con ese aspecto). Se trataría del típico compañero del investigador que tantas veces hemos visto y leído. La mujer que completa este grupo central también podría unirse a la lista de acompañantes femeninas de cualquier aventurero que se precie, que no son simples objetos, sino que participan en la acción y ayudan en la solución de los problemas. Tal vez echamos de menos una mayor profundidad en el antagonista al que se podría haber sacado más partido alargando su intervención.

Con todo, la novela es un muy decente ejemplo de relato steampunk que no nos desborda con tecnicismos ni teorías. Y las que hay han sido ampliamente explicadas en otros relatos y no hace falta detenernos excesivamente en ellas. De no haber sabido que se trataba de una saga, tal vez hubiéramos echado de menos que se cerrasen unas tramas y que nos explicase alguna de ellas, cosa que esperamos haga en novelas posteriores.

En resumen, una lectura ligera que consigue con creces su misión de entretenernos e, incluso, se permite la crítica social.

martes, 22 de noviembre de 2016

Reseña de "Luna: Luna nueva" de Ian McDonald


Difícil hablar sobre este libro. Lo primero decir que es la primera parte de una trilogía y que, al final, te deja como ese último capítulo de la temporada de tu serie favorita, con todo manga por hombro, sin saber realmente qué te puedes esperar del siguiente libro.

Ahora viene cuando debería ponerme a criticarlo, pero no estoy segura de si me ha gustado o no. Las primeras páginas, casi un cuarto o un tercio del libro, se hacen pesadas siguiendo la vida de la familia Corta que bien podríamos comparar con Falcon Crest o Dinastía. Traiciones, luchas por el poder, sexo, negociaciones, complots... hay quien lo ha comparado con Juego de Tronos, pero no estoy tan segura de eso. Comienzas con ganas de que acaben con esa familia en la que no tienes ni uno solo que te caiga bien (bueno, tal vez la pequeña Luna) y después de muchos capítulos de telenovela parece que se pone interesante. Sigues leyendo para ver en qué queda todo y te das cuenta de que sigue la telenovela, pero hay algo que te obliga a seguir leyendo. Alguno de los personajes parece que ya no te cae tan mal y comienzas a ver por qué actúa de la forma en que lo hace. Bien, hasta en Falcon Crest Angela Channing tenía sus razones para actuar como lo hacía. Y ya en las últimas 15 páginas aproximadamente se desencadena el caos y ya no puedes dejar de leer hasta el final.

Ahora viene la reflexión, ¿era necesario lo anterior para llegar a este final? Puede que le sobre mucho relleno (sobre todo la historia de la matriarca que, al menos en este libro, no viene especialmente a cuento). Luego las descripciones de los modelitos que llevan los personajes, que a veces te dan ganas de comprobar que no estás leyendo el Vogue. Con todo eso, el autor corre el riesgo de que se abandone la lectura antes de que comience a interesarte si no estás prevenido por otros que lo leyeron antes que tú. E incluso así.

Así que ahí está mi duda, ¿me ha gustado o no? Sí, pero he estado en un tris de abandonarlo al poco de empezarlo. El autor echa por tierra la teoría de que el comienzo debe enganchar al lector. En este caso no ha seguido esa máxima. Y se arriesga demasiado a que nos demos por vencidos.

Reseña de "Desgracia" de John Maxwell Coetzee


Debo comenzar diciendo que la novela no me ha gustado, pero quiero matizar esta opinión. No me ha gustado por la sensación que me ha dejado al final; una sensación de derrota y conformismo. Sobre todo de esto último. En un principio no simpaticé para nada con el personaje principal. Sus acciones y sus pensamientos estaban totalmente en contra de lo que yo pensaba, pero seguí leyendo esperando que cambiase a lo largo de la novela o que hubiese algo que castigase su forma de actuar. Cuando, a las pocas páginas descubrí que era así, me vi sumergida en una situación en la que me sentía extraña. Los personajes no actuaban siguiendo lo que yo entendía que sería lo lógico. Me rebelaba cada vez que leía cómo se iban hundiendo más y más y, sin embargo, lo aceptaban todo como si fuera lo que tenía que pasar.

Dicen que los buenos autores hacen sacudir algo en tu interior mientras los lees. Pues John Maxwell Coetzee lo ha conseguido. Y ahora vuelvo a mi primera afirmación; no me ha gustado que me sacudiese de este modo y que me dejase esa sensación de impotencia y rabia ante lo que sucedía en las páginas de su libro. Mi primera reacción fue la de pensar que no me había gustado nada, pero al día siguiente, reflexionando, me di cuenta de que había conseguido su objetivo: hacerme seguir pensando en su novela mucho después de haberla terminado. Con unos personajes en los que no me sentía identificada, que no me eran simpáticos, que no se acercaban en lo más mínimo a lo que yo pudiera pensar. Ni siquiera les tuve lástima al final del libro. Me dieron ganas de sacudirles para que entraran en razón. Y creo que esa es el acierto del autor: hacer que nos rebelemos ante sus personajes y sus hechos, ante su conformismo con la situación que están viviendo. Al menos es lo que el señor Coetzee ha producido en mí.

domingo, 23 de octubre de 2016

Reseña de "Psicokillers" de Juan Antonio Cebrián


Juan Antonio Cebrián consigue en "Psicokillers" que un tema que podría llenarse de escenas macabras y caer en lo morboso se lea con gusto e incluso, en ciertas ocasiones, con una media sonrisa debido a pinceladas de humor negro que el autor se permite.

En este libro ha recuperado historias contadas en su programa de radio, Pasajes del Terror, y, como tales, son breves; centrándose en los hechos alrededor de varios psicópatas de la historia. En muchos de ellos, nos muestra los orígenes de sus psicopatías, para continuar con los hechos por los que están recogidos en esta antología de psicópatas y su desenlace.

Al final del libro recoge, muy brevemente, la historia de otros que también estaban incluidos en su programa de radio.

El método utilizado para exponer todos los casos nos deja con muchas lagunas sobre el comportamiento de estos asesinos, pero es una buena muestra de hasta qué punto puede llegar la mente humana en su deseo por hacer mal al prójimo. No pretende profundizar en ello, solo trataría de hacer una labor de divulgación de la existencia de esos asesinos que, sabiendo en todo momento lo que estaban haciendo, se dejan llevar por sus más oscuros instintos.

viernes, 21 de octubre de 2016

Reseña de "La ciencia ficción a la luz de gas"



Después de convencerme a mí misma de que mi concepto de la ciencia ficción se apartaba bastante del que tenía el editor cuando hizo esta antología, he dejado de plantearme si los relatos son o no ciencia ficción y he disfrutado de ellos como joyas del terror decimonónico.

Como en cualquier antología, no todos están al mismo nivel, aunque dejando aparte algunos relatos más filosóficos, representarían muy bien los relatos góticos del siglo XIX. Muy recomendable si queremos tener una visión global de ellos. En este sentido, agradezco al editor haberme hecho descubrir a Hans Heinz Ewers como un estupendo autor.

Los relatos de la segunda mitad de la antología me han mantenido en tensión a pesar de que, como he dicho en uno de ellos, nuestro olfato actual para descubrir el desenlace parezca estar muy desarrollado. Sabemos cómo van a acabar porque lo hemos visto y leído en otros lugares, pero el arte que tienen los autores para mantenernos pegados al libro es de elogiar. Muchos autores, incluida yo misma, deberíamos aprender de ellos.

También se agradece que sean relatos breves y no se alarguen en exceso. Algunos, como el de Apollinaire, es tan breve que sorprende lo que se puede hacer con tan pocas palabras.

En resumen, si obviamos el título tan desafortunado (y a la vez tan bonito), se trata de una antología recomendada para todos los amantes del terror gótico, que no necesita las vísceras sangrantes para sobrecoger.

domingo, 16 de octubre de 2016

Reseña "A sangre fría" de Truman Capote



“A sangre fría” de Truman Capote podría considerarse más una investigación periodística sobre los asesinatos cometidos en Holcomb (Kansas) que una novela propiamente dicha. De ahí la calificación que hizo el propio autor de “non fiction novel”. Es un relato exhaustivo de la investigación del crimen y del posterior juicio a los culpables, pero sin olvidar mostrar con detalle los antecedentes familiares y personales de ambos asesinos. Podría considerarse, como hemos dicho, una investigación periodística que Capote intentó novelizar; de tal forma que, a veces, se vuelve lenta e incluso repetitiva hacia el final cuando leemos los mismos hechos contados casi del mismo modo.

En la primera parte nos presenta a los asesinados a través de sus acciones y de la relación con sus vecinos. Parece una familia perfecta, casi demasiado idealizada. Por lo que da apariencia de irreal. Tiene problemas, pero parece como si a ellos les uniesen todavía más. Sus vecinos los tienen como una familia modelo. Aunque Capote se permite una nota discordante con esta opinión a través de la encargada de Correos.

Después del asesinato se centra, casi con exclusividad, en los dos asesinos por los que parece sentir hasta simpatía. Los presenta con minuciosidad mediante sus acciones y pensamientos. A veces demasiado, lo que hace que la acción sea lenta e incluso se vea interrumpida con la introducción de hechos ajenos a la propia historia como los crímenes sucedidos anteriormente en Holcomb. Añade conversaciones, cartas y confesiones reales plasmadas literalmente como si de verdad fuera un relato periodístico. También momentos con la familia de los asesinos o con los habitantes del pueblo que parecen casi entrevistas.


Como análisis de la personalidad de los arrestados es muy completo, de tal forma que parece casi disculpar sus acciones por el bagaje familiar que cada uno tiene. Con todo esto parece adelantarse a la literatura que se hacía en su época. El problema de ser tan minucioso durante todo el relato es que, desde la condena hasta la ejecución, la acción se precipita y parece descompensar la novela. Su lectura es recomendable en cuanto a la caracterización de los dos asesinos. Pero no como novela propiamente dicha, sino como artículo periodístico de investigación.

miércoles, 12 de octubre de 2016

Reseña de "Cuentos de amor" de Jun'ichirō Tanizaki



Al tratarse de una recopilación de cuentos encontramos relatos que sobresalen por encima del resto. Los “Cuentos de amor” de Jun'ichirō Tanizaki recogen once piezas cuyo hilo es el amor. Pero este amor no es el típico que podríamos esperar. Se tratan temas de fetichismo, triángulos amorosos (hasta cuadrados amorosos), amor hacia los animales, celos, masoquismo e incluso podríamos hablar de una necrofilia un poco sui generis. Aunque este tema no es el único que podemos encontrar en ellos. Hay diversas temáticas entrelazadas con este tema principal. Algunos de los cuentos parecen más una exposición de sensaciones que un relato en sí. A este respecto, sobre todo me han llamado la atención dos de ellos (“El secreto” y “La flor azul”) que más podrían ser calificados de descripción detallada del vestuario de una mujer japonesa que de un cuento. Otros nos sorprenden derivando hacia un relato de terror (“El caso del baño Yanagi”) o hacia una novela detectivesca (“El caso Crippen a la japonesa”).

Lo que me ha parecido más curioso, al no estar familiarizada con la literatura japonesa, es esa tendencia  de la misma sobre la que se nos advierte en el prólogo. Los cuentos japoneses no se cierran al final como lo hacen los occidentales. No tienen un fin e, incluso, en nuestra visión, estarían inconclusos, dejándonos un poco perplejos esperando un final al uso. Lo que en un principio podría sorprendernos o molestarnos, abre la posibilidad de seguir pensando en ellos e imaginarnos cómo podrían continuar, o, al menos, hacernos preguntas sobre ello.


Debo destacar también la labor de recopilación que consigue dejarnos un sabor agridulce a su finalización, cerrando con el relato que, a mi entender, es el mejor: “La gata, el amo y sus mujeres”. Un tema en apariencia sin importancia es expuesto desde diferentes perspectivas según el personaje principal en aquel momento. Y la sensación de soledad que nos deja al final está muy bien conseguida. Nos muestra a diferentes personas a través de lo que los demás piensan de ellos, pero se completan con la visión que ellos mismos tienen de sí mismos. Y así esa visión no es unívoca. Parecen actuar de un modo llevados por unos sentimientos que no son tales y que, en el fondo, solo ocultan la soledad en lo más profundo.